“Soy
un hombre que ama la naturaleza y mi aprendizaje lo he hecho en la selva”,
confió Marc de Civrieux, en una entrevista. Este estudioso nació en Niza
(Francia) y llegó a Venezuela en 1939, para quedarse. En 1945 se graduó de
Ingeniero Geólogo en la
Universidad Central de Venezuela con calificación Magna Cum
Laude, formando parte de las primeras promociones de geólogos en el país.
De
ahí en adelante, enfocándose hacia la estratigrafía y micropalentología, ocupa
cargos de responsabilidad en el Ministerio de Minas e Hidrocarburos donde funda
la División
de Documentación Geológica.
En
1946, Civrieux, junto con el Dr. René Lichy participa en una importante
expedición al Orinoco adentrándose por el Brazo Casiquiare, siguiendo la ruta
de Humboldt. Se encuentran por primera vez, el geólogo de formación, pero
provisto de una gran sensibilidad antropológica por las etnias con las cuales
tuvo contacto en sus exploraciones. Allí escucha y recopila valiosos datos,
unos permanecen en silencio y otros fueron publicados, junto con Lichy, bajo el
título Exploración por la
Región Amazónica de Venezuela en 1949.
En
1950 forma parte de la expedición patrocinada por la Universidad de Puerto
Rico y Naciones Unidas a la región del
Marahuaka ( Alto Orinoco) en el Estado Amazonas durante la cual tiene contacto
con familias kunuhana Desde los primeros contactos, va reuniendo datos
documentales. Los temas tratados es extenso y engloba otros campos del saber:
etnología, etnobotánica, lingüística y
shamanismo.
En
1951, junto con le profesor Lichy
trabajan en un proyecto inicial para explorar el río Orinoco hasta sus fuents y
ese mismo año, se conforma la primera
expedición Franco-Venezolana con con dicho objetivo. Sellier de Civrieux forma
parte del equipo de científicos de esta gran
aventura a como geólogo
representante de la Universidad Central
de Venezuela y del Ministerio de Minas de la República de Venezuela.
Posteriormente, en el transcurso de la década, su esfuerzo y búsqueda se enfoca
hacia la mitología so’to y compila una serie de narraciones a raíz de su experiencia directa y de
trabajos de campo con dicha etnia al
lado de “Dawasehuma”, llamado por los criollos Manuel Velázquez, patriarca de La Esmeralda en el Alto
Orinoco y guía invalorable de los primeros exploradores a las fuentes del gran
río Orinoco en la Sierra
Parima de Guayana. Manuel Velázquez todavía vive y se residencia un tiempo en La Esmeralda y otro en
Puerto Ayacucho.
Después de las expediciones al Alto Orinoco viaja a
Yucatán (México), , acompañado de Luis Laffer y recopila importantes datos
documentales, en especial sobre el Popol-Vuh y un rico material musical
divulgados a través de un LP: El ültimo de los Cocccon”. Luis Laffer ha sido el
gran recopilados y divulgador de la música folklórica venezolana y americana.
Entre
1949 y 1959, Civrieux desempeño el cargo de Micropalentólogo y Estratígrafo del
Departamento de Geología del Ministerio de Minas e Hidrocarburos y trabajó en
estrecha colaboración con geólogos de
campo. Produjo más de 100 informes
técnicos de peleontología y bioestratigrafía,
de Geología Regional, Extensión de la Formación Roraima
en el territorio Amazonas, Geología de la Región Ventuari –Cunucunuma,
Marahuaka, Geología del Alto Orinoco, entre otros, que reposan en los Archivos
del Ministerio y que fueron ampliamente utilizados y citados con frecuencia en
la literatura geológica en Venezuela. Sus determinaciones y comentarios contribuyeron
al establecimiento de la cronoestratígrafia y de la geología regional del país.
En
la Compañía Creole
Petroleum Corporation, en la cual trabajó de 1945 a 1949, produjo
aproximadamente 80 informes paleontológicos y bio-estratigráficos sobre la superficie
y el subsuelo de Venezuela.
En
1952, sale a la luz el Primer Léxico Estratigráfico de Venezuela, coordinado
por Civrieux, el cual sigue siendo texto obligado para los estudiantes e
investigadores de geología por su gran importancia para el conocimiento físico
del país. Posteriormente se incorpora al Centro Nacional de Investigaciones
Científicas en París, Francia para discutir la edición Internacional de dicha
obra.
De 1950 a 1960 representa al Ministerio de Minas
en diversos Congresos y Simposium Nacionales e Internacionales sobre
información e investigaciones geológicas, micropalentología y estratigrafía. A
la par que se desempeña como un empedernido investigador ejerce la docencia en
el liceo Andrés Bello, Universidad Santa María, Universidad Central de
Venezuela, Escuela Técnica Industrial de Caracas.
En
1960 Civrieux se ausenta de Venezuela, país que él mismo adoptó con pasión
venezolanista. Viajó a la India
al ashram del maestro Shivananda donde aprende las técnicas del yoga, de
meditación y principios del sánscrito. Después de arduo aprendizaje, de la India pasa a Turquía donde
se desempeña como geólogo paleontólogo y estratígrafo de la compañía francesa
de petróleo. Es para él una estadía muy prolífica pues le permite viajar por
pueblos antiguos como Armenia, Israel, Ucrania, recorriendo los pasos de los
primeros cristianos, de Alejandro Magno y sabios religiosos. Civrieux recoge
sus viajes de trabajo en exquisitas fotografías. También de esa época es un
Recetario de Comidas que elaboró en Ankara. Después de esa experiencia no tuvo
mucha afición por la cocina.
Lleno de sueños y promesas, por invitación del
Rector de la
Universidad De Oriente, con sede en Cumaná, Estado Sucre,
vuelve a Venezuela, la patria que adoptó por amor. Se incorpora al personal
docente de la Universidad
de Oriente: primero a la
Escuela de Geominas, en Ciudad Bolívar y luego a su querido
Instituto Oceanográfico de Cumaná en 1967 donde desarrolla una amplia y
fructífera labor especialmente dirigida a la investigaciones de foraminíferos.
En
el instituto además de reconocido investigador, es miembro de la Junta Editorial
del Instituto Oceanográfico de 1969
a 1979, Editor de Cuadernos Oceanográficos de 1970 a 1979 y publica más de
20 trabajos entre ellos Cuatro Géneros de Foraminíferos del Mar Caribe,
Biofacies bentónicas de foraminíferos de la Plataforma Continental
de Cumaná, Cañones Submarinos frente a la Cordillera de la Costa de Venezuela, La influencia de los
parámetros físico químicos del fondo en la facies de foraminíferos bentónicos
en colaboración con J. Bonilla, Ecología y Distribución de Foraminíferos
bentónicos del Golfo de Santa Fe en colaboración con Pedro .José Bermúdez,
Geología del Mar Caribe, Foraminíferos Indicadores de Comunidades Bentónicas
Recientes de Venezuela, Las Discorbidae del Mar Caribe, etc.
Civrieux
es un apasionado de los foraminíferos a los cuales llama microseres marinos,
porque los foraminíferos no son fósiles de por sí, son muy abundantes n el Mar
Caribe y sirven de diagnóstico para determinar la edad de los estratos, sin
embargo la ciencia que los estudia es conocida como micropalentología.
Como
geólogo de formación, pero con una gran curiosidad y sensibilidad
antropológica, ya desde 1946 se había interesado por los Kariña de la Mesa de Guanipa. Durante
todas sus expediciones tuvo notables contactos con individuos de la etnia
yekuana.
Después
de su expedición a las fuentes del Orinoco en 1951 enfocó sus esfuerzos hacia
el compendio de narraciones de la mitología yekuana. Manuel Velásquez, uno de
los guías de la expedición oficial a la fuentes del Orinoco, sabio indígena,
patriarca de La Esmeralda
(Amazonas) fue para Civrieux un gran amigo que lo guió hacia la comprensión de
la mitología yekuana.
En
la década de los años 70 Civrieux se dedicó con verdadero ahínco a desarrollar
una gran actividad científica a la par que continuó su gran actividad en la
investigación lingüística, etnobotánica y etnológica entre diversas comunidades
indígenas.
En
1970 aparece por primera vez su obra “WATUNNA”. A propósito de Watunna dice el
escritor Luis Angel Duque en el prólogo de “El Soberbio Orinoco” de Julio
Verne, editado en 2000: “Esta obra Watunna, revela el rico universo de los
yekuana y le atribuye un carácter ético a la formación de esta gran etnia...” Y
es indudable que Watunna lanza definitivamente a Civrieux como uno de los
grandes mitólogos del Orinoco.
Cumaná,
la vieja ciudad de oriente, le permite adentrarse en las zonas ocultas del
conocimiento: funda la
Gran Fraternidad Universal con el maestro Luis Deza donde
participa el poeta Arnaldo Acosta Bello, el pintor Freddy Pereira y otros
amigos. Funda la Sociedad
de Alquimistas, lee a Fulcanelli, conoce a Eugenio Canseliet a través de Carlos
Corcull, y traduce el Mutus Liber.
“Sus
obligaciones académicas –dice Luis Alberto Crespo– sus experiencias y estudios
esotéricos en profundidad, y la escritura –porque se revela como un gran
literato– no lo distraen de su estudio vocacional y publica dos grandes libros
Los Caribes en la Conquista
de la Guayana Española
y Religión y Magia Kariña. Pero Civrieux no solo se dedica el documento
histórico sino que se adentra junto con el gran recopilador Luis Laffer a
grabar los cantos de los Coaca de Cumanacoa “Los Carrizos precolombinos” y el
célebre Mare Mare de los Kariña. Con esta visión no hay duda que Civrieux se
empeña en revelar en sus investigaciones no solo la letra, el escrito sino
otros aspectos de la cultura como la música y la imagen para entregar una
integración o síntesis maravillosa.
En
1985 se retira a un pequeño valle de los Andes, a La Mucuy Baja , al pie de
la sierra nevada de Mérida. Este paso del sabio -del mar Caribe a la Sierra Nevada-
sorprende. Confiesa que quiere ver de nuevo paisajes parecidos a los franceses
y a viejos y entrañables amigos. Trae dos sueños que acarició en Oriente, el
estudio comparativo de las culturas, entre los que desarrollo “El Mito de los
Hermanos Gemelos”, y la publicación del “Diario de Cumaná -1498 -1599” . Para la realización
de estas utopías viene con todos los hierros, su amplia biblioteca de más de
10.000 volúmenes de historia y mitos del mundo entero y cientos de carpetas con
un conjunto de crónicas de 1498
a 1599, sobre la historia de Cumaná, año por año,
también manuscritos sobre las etnias yekuana, kariña, chaima y paraujanos y una
biografía manuscrita de G.I.Gurdjieff, filósofo sufi del Siglo XX. Y algo que
no traía, pero que apenas llega a la
Mucuy desarrolla: un esquema para ampliar sus conocimientos
sobre los timote de Mérida. Todavía Civrieux muestra ese ímpetu de investigador
a tiempo completo, de hombre de fe y pasión inquebrantables, verdaderamente,
por una nueva Venezuela.
Hace
siete años Marc de Civrieux, este gran hombre del saber y de la honestidad
profesional a toda costa, voló al cielo -que él había dado conocer- el Cielo de
Wanadi. Dejó a los que siguen un gran legado para la venezolanidad y la
humanidad entera.
Marc sigue vivo en su biblioteca, ese gran
reservorio del saber que posee Mérida. Vive en el corazón de su compañera, de
sus hijos y familiares venezolanos, en el de su amigo Manuel Velásquez y en el
de otros que quiso a lo largo de su periplo vital.
“Marc de Civrieux, Don Marcos para sus
vecinos, deja una huella sólida en el medio académico y en la cultura
venezolanos, Su vida se apagó el 17 de abril del 2003, un jueves Santo. No vale
despedirse de él. Es, y sigue siendo un espíritu enigmático y sabio. Cuando se
intente evaluar su legado, habrá que ser fiel a su invitación esencial, ir más
allá, mirar hacia nuevos horizontes de forma metódica e incansable intentando
descubrir los arcanos de la existencia” escribe Alejandro Reig (Rev.
Antropológica, Fundación La
Salle N ° 96, Nos. 2001-2006)
saludos, es posible saber algo mas sobre el creador de este blog. ya que el personaje es muy importante para mi, pues en los 80, en su casa en merida, pase de los mejores momentos de mi niñes saludos. federicocracco@gmail.com
ResponderEliminarimportante trabajo
ResponderEliminarQue dias esta abierta esta biblioteca para visitarla y cual es el horario. Muy interesante la obra del gran maestro Jean Marc
ResponderEliminarYo, Virgilio Fergusson, suelo estar por la Biblioteca los días VIERNES, coordinando lo relativo a la COLECCIÓN DE INSTRUMENTOS MUSICALES, pero debes contactarme antes por los teléfonos (0412) 425 40 99//(0416) 177 57 73.
EliminarBuenos dias Estoy buscando la siguiente referencia en digital Sellier de Civrieux, J.M., 1977. Las Discorbidae del Mar Caribe, frente a Venezuela. Cuadernos Oceanograficos, Universidad de Oriente, Cumana, 6: 1-44.
ResponderEliminar¿podría enviarlo a hchitty@usb.ve?
Tengo el honor de haber sido alumno del Dr De Civrieux en el año 1955, excelente profesor y narrador de la expedición con Frank Risquez a las cabeceras del Orinoco. ¿Donde y cuando puedo visitar la biblioteca?
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